Este es tan solo uno de los múltiples ejemplos de como perder el tiempo adecuadamente, en un entorno que facilite la condición de autosuficiencia. En eso, los himänos son unos auténticos expertos y de alguna manera propulsores de este tipo de práctica turística.
Hacer este tipo de turismo favorece la despreocupación, algo muy necesario, según sus teóricos, en un universo que no atiende a los caprichos de los seres vivos sino a su propia condición caótica. Cada uno es dueño de su tiempo y el aburrimiento es tan solo una opción de como administrarlo, válida como cualquier otra.
Dentro de la filosofía popular himäna, encontramos un proverbio perteneciente a la famosa "Teoría de la concepción temporal", que concuerda acertadamente con esta fascinante práctica:
"Pierde tu tiempo a tu antojo, antes de que otros te lo roben"
Otra variante de este proverbio, usada en la zona sur de Regiönes Mïnimas, comienza con la frase: "No seas imbécil". Los sureños suelen aplicar este tipo de matices a los proverbios populares, añadiendo siempre a estos una frase insultante que ellos califican como "el puñal". Según sus principios, las sentencias que no cortan al que las recibe, no hacen sangrar su corazón e impiden en consecuencia la asimilación rotunda del concepto en detrimento de su crecimiento personal. Todo esto nos lleva a otro de los pilares fundamentales de esta corriente filosófica:
"Ser herido es ser querido"